"...Soy la Terremó, soy la Terremó..."

Nota mental: la proxima vez que cante en un karaoke, intentar elegir una cancion que no tenga tantos agudos como "A little respect" de Erasure ("so baby pleeeeaaseee, give a little respect... tooooo meeeee"). Soy barítono, claramente.

De todas maneras entró en el Top 3 de "Mejores Canciones Cantadas Por Mí En Un Karaoke", que al día de hoy es mas o menos así:

1- Lloran las rosas - Christian Castro

2- She - Elvis Costello

3- A little respect - Erasure



La Terremoto estuvo muy, muy bien. Gracias Bierce por la recomendación.

Apuntes varios de esta última semana:

• El fin de semana pasado fue el peor del año lejos. Hace mucho que no me sentía tan deprimido.
• Volvió mi señor novio (quien conoce de la existencia de este blog, pero acusa no leerlo: claramente no le creemos) de viaje. Una cosa compensa a la otra.
• Tuve un brote alérgico en todo el cuerpo. Si mi tarjeta de OSDE sumara puntos cada vez que la uso, ya los podría canjear por una juguera, mínimo.
• Los últimos 3 días salí de trabajar después de las 23 horas. Nunca pero nunca quise tanto tener un trabajo con el insulso horario de 9 a 18 que estos últimos días.
• Si nada altera mis planes (y aunque esto sería un apunte de la próxima semana), entre lunes y martes me estaré anotando en el CBC para la licenciatura en matemáticas. Sí, soy un freak, qué, no se habían dado cuenta...
• Siento culpa por tener tan dejado a Este Blog. Es que tengo tan poco tiempo... Pero prometo cuidarte... En serio, te aviso, eh, no, sí, te llamo, beso, chau, chau!

Formula imperfecta

(Asado x 4) + (Vino x 2) + Noche = Pesadillas horrorosamente vívidas

Nunca más. Lo juro.

Continuando con el post anterior, después de ver algunos capítulos más de Jericho, puedo llegar a concluir que es bastante embolante. Pero Este Blog banca a muerte a Skeet Ulrich, con su nombre raro y sus precoces patas de gallo, así que voy a seguir bajandome toda la temporada.

Es que yo soy feliz con muy poco: a mi dame una escena así por capítulo, y listo...

(Como dirían en Chicle Cosmos: Wish you were queer...)

Como si con Lost no me fuera suficiente, ya tengo dos nuevas series yanquis en mi lista semanal de downloads:

La primera es Heroes. Vendría a ser una mezcla entre Los 4400 y X-men, con un tono similar a la ya mencionada Lost. En distintas partes del mundo, personas normales descubren que tienen algún tipo de superpoder. Tenemos al enfermero supersensible que cree que vuela (aunque al final del primer capítulo, su hermano -un político típicamente ambicioso- se lleva una sorpresa), al pintor heroínomano (un hottie latino) que plasma el futuro en sus pinturas, una stripper (Ali Larter, la única sobreviviente femenina de Destino Final) cuyo reflejo en el espejo es independiente a ella, y podría tener que ver con cosas muy feas que pasan a su alrededor; un japonés que puede teletransportarse y manipular el tiempo; un polícia (Greg Grunberg, de Felicity y Alias) que puede escuchar lo que piensan los demás, y una porrista muy Britney que es indestructible (y lo suficiente catrasca como para poder demostrarlo varias veces por capítulo): resucita si se muere, regenera sus miembros si los pierde, etc.

No todos los "héroes" son buenos. Sin embargo, como el nombre de la serie lo indica, en algún momento es muy probable que los caminos de los protagonistas se vayan entrecruzando y estos se hagan cargo de sus poderes para defender a la humanidad de los malvados.

Un asesino en serie que persigue a los héroes; un científico hindú que estaba tras la pista de estas personas con poderes y que muere en el primer capítulo, cuyo hijo buscará la verdad sobre estos "mutantes"; un hombre al que Matt (el policía) no puede escucharle los pensamientos; el papá de la porrista que está claramente metido en todo el chanchullo, y no parece nada bueno; una posible explosión nuclear gigantesca en Nueva York: todo suma para que los misterios se vayan acumulando y se generen una vuelta de tuerca atrás de la otra. En tres capítulos que ya vi, pasó de todo. Traté de averiguar si Heroes está entre los próximos estrenos de alguno de los canales de series pero no encontré nada. Posiblemente la veamos próximamente por la pantalla de AXN o Sony. O, si les generó la suficiente ansiedad, recurrirán a su programa de downloads favoritos. No se van a arrepentir.

La segunda serie que empecé a bajar, y de la que hasta ahora vi sólo el capítulo inicial, se llama Jericho. El protagonista es Jake (Skeet Ulrich -el noviecito de Sidney en Scream- que está para el crimen) , un treintañero que vuelve a su pueblo (Jericho) después de cinco años de su misteriosa ida. Vuelve para honrar la memoria de su recientemente fallecido abuelo, y de paso cañazo reclamar su parte de la herencia, la que su padre (que por si fuera poco es el alcalde del pueblo) le niega. Cuando retoma la ruta para irse nuevamente de su pueblo, una explosión nuclear se produce en donde se supone está en la ciudad vecina de Denver. Jake choca con otro auto, los dos mirando obnubilados la nube con forma de hongo.

Por otro lado, en el pueblo, las comunicaciones no funcionan, se corta la luz y varios personajes sufren tragedias personales. Algo hace suponer que la de Denver no es la única explosión nuclear, lo que podría significar un atentado terrorista múltiple. Jake, casi sin querer, se convierte en el héroe del pueblo y ahora habrá que ver cómo continuará la vida de estos pueblerinos, con el fantasma de que pueden ser los únicos vivos en el país (el resto del mundo no importa, obvio), y, para colmo, con la posibilidad de que un preso peligrosísimo (o un grupo de presos, no lo sabemos todavía) los aceche, luego de que el micro que los transportaba chocara cerca del pueblo.

Sin parecer, en principio, tan adictiva como Heroes o Lost, y con un poco de miedo de que todo se transforme en una parábola cristiana (el nombre de la serie no ayuda, y Jake es el claro ejemplo del "hijo pródigo), el comienzo de la serie es más que interesante y por ahora merecerá su lugar en mi lista de descargas del Ares.

Odio las publicidades. No soporto a la gente que se "mata de risa" cuando ve alguna pretendidamente graciosa. Particularmente, detesto toda la campaña de Ala con sus niños sucios, y la última de Schneider (la del muchacho que camina por la ciudad, luego por el campo, dice dos chistes malos y se sube a un caballo) me parece inclasificable.

Pero tengo que admitir que estas dos me gustan, y mucho.


(esta me parece re cute, y la canción está muy bien)



(toda la nueva campaña de Arnet me parece buena, pero con esta se pasan. La parte de Ranni -aunque suelo quejarme del uso de los famosos para fines bizarros desde Bergara Leumann y Leopoldo Luque en la de Telecom- es mortal)

Para culminar (espero) la trilogía que comenzó con la pseudo-culebrilla y continuó con una faringitis puntácea, este fin de semana estuve con gastroenteritis.

Por otro lado, hoy empiezo a trabajar en la producción de una película, tras recibir esta y otra popuesta el mismo día la semana pasada: sabía que esto iba a pasarme después de cuatro meses de desocupación. Voy a trabajar con amigos, hasta enero por lo menos.

Puede que todo sea una gran jugarreta de mis traicioneros nervios. Puede. O también pueden ser los panchos que comí en Bubba's, en el Paseo del Sol, el viernes. Ya me parecía algo sospechosa la salsa de brenejenas.

¿Hay algo más dificil que comprarle un regalo a una mujer?

¿Qué surge de la mezcla entre mi tema ochentero favorito y mi grupo preferido de los '90 ?





Rta.: Un youtube, obvio.

Desde el viernes estoy con una faringitis atroz. Tengo la garganta completamente cerrada, con "unas placas enooormes" (según el médico). Ni siquiera puedo tragar mi propia saliva, y apenas puedo hablar: la poca voz que tengo está completamente irreconocible. El sábado, por si fuera poco, llegue a los 39,5 grados de fiebre. En el trascurso de la tarde, lo único que hice fue intentar dormir.

En mi delirio febril, tuve un sueño bastante extraño. Más que nada por su duración; podía despertarme y volverme a dormir varias veces, que el sueño siempre continuaba donde lo había dejado. Como suele pasarme con los sueños, se me ovidaron varios detalles, pero en síntesis era algo así:

Yo era uno de los pasajeros del avión que se cayó en Brasil. Estabamos todos vivos, pero nadie venía a rescatarnos. Mis tareas fundamentales dentro del grupo de sobrevivientes eran dos: enseñarles castellano al resto de los pasajeros, y guiarlos en busca de ayuda: era una especie de líder.

Sí, ya sé, puede que esté demasiado ansioso por que vuelva Lost (cuya tercera temporada arranca este miércoles en EEUU), o haya recordado la terrible Viven!, que vi hace poco más de un mes.

Finalmente, el domingo me enteré que no habría ningun sobreviviente. Sólo una teoría indicaba que cinco de los pasajeros podrían haber sobrevivido y estarían en manos de una tribu indígena. Me puse contento: mi sueño tenía sentido.